casting a una rellenita recien divorciada
Una vez roto su matrimonio y sin ninguna presión moral que la condicione, por fin esta rellenita ha hecho realidad su sueño de ir a un casting porno y ponerse a prueba a sí misma. Condicionada por un marido excesivamente posesivo y una familia demasiado protectora decidió romper todo vínculo con ellos y dedicarse a lo que realmente le gustaba, el porno, profesión muy digna y que si no me equivoco será lo que le dé de comer de aquí en adelante.