Su hija dormida, el capricho de papá
Padre e hija tienen una relación muy especial. A él le gusta acariciar su cuerpo mientras duerme, tocarle sus pechos… también espiarla mientras se viste o desnuda. Es sin duda el capricho de su padre, pero no por nada, sino porque a ella le gusta que él lo haga. Es parte de su juego y de su fantasía sexual. De hecho cuando la jovencita va a ducharse hace amago de taparse con la toalla, pero su padre le deja claro que no tiene nada que no haya visto antes, que puede quitársela. Eso se lo dice con la polla en la mano mientras la meneaba lentamente. Más tarde nos deleitan con una auténtica follada padre e hija, en la que su papá se le corre en la boca.