Su hijastra se la ponía dura, no es para menos

Teniendo como hijastra a esta jovencita no es de extrañar que siempre tuviera su verga bien dura, estaba buenísima la perra. Pero lo mejor de todo es que fueran capaces de grabarse follando en difentes ocasiones, siempre ellos dos por supuesto. La primera fue casi como por casualidad, ambos lo deseaban y ella se lo puso bastante fácil. Cuando se quisieron dar cuenta la zorrita le estaba comiendo la polla. Llegó un punto en el que les daba igual todo, follaban tanto fuera de casa como dentro. Unas veces se corría fuera y otras veces se lo echaba todo dentro de su coño mientras ella gemía del placer al sentir su leche. Su madre no se enteró, aunque era obvio que él solo estaba con la madura para así poder follarse a su hija todos los días.