un favor a cambio de otro favor
Desde que las cadenas de favores se pusieron de moda al principio de la crisis la cosa ha ido a más y no son pocos que viven del trueque: yo te echo una mano en lo que pueda y tu a mi, así estamos en paz. Pues bien, por supuesto que esto se aplica en el sexo y seguro que siempre hay alguien dispuesto a hacernos esas cosillas que nuestra pareja no nos hace, no sé, una pajilla, sexo anal, una mamada, un dedo en el culito, una meadita.. cualquier cosa vamos. Este mulato y su follamiga rubia nos enseñarán lo sencillo que es tener contenta a una persona intercambiándose favores en una follada de las buenas, a veces nos complicamos demasiado y creo que ya es hora de dejar de mirarnos el ombligo y ponernos a ayudar al projimo :P.